Por Juan Pablo Ojeda
La presidenta Claudia Sheinbaum Pardo aseguró que hubo una reacción rápida de las fuerzas federales y de las corporaciones de seguridad de los tres niveles de gobierno luego de que se difundieran imágenes de presuntos integrantes del grupo criminal conocido como “Los Tlacos” recorriendo calles de Tlacotepec, Guerrero, para entregar dulces, juguetes y regalos a niñas y niños durante las celebraciones navideñas.
Durante su mensaje, la mandataria explicó que, ante este tipo de situaciones, las autoridades actúan de inmediato, pero con un criterio central: evitar enfrentamientos armados que puedan poner en riesgo a la población civil. Subrayó que la presencia de fuerzas de seguridad se mantuvo en la zona y que se atendió el hecho sin propiciar un choque directo con los hombres armados que aparecieron en los videos difundidos en redes sociales.
Sheinbaum señaló que la atención de estos posibles hechos criminales recae principalmente en los elementos desplegados en las costas y zonas serranas de Guerrero, particularmente personal de la Secretaría de Marina y de la Secretaría de la Defensa Nacional, quienes mantienen operaciones permanentes en la región. Insistió en que la prioridad es proteger a la ciudadanía y evitar que personas ajenas a los grupos armados resulten lesionadas o pierdan la vida.
Las imágenes que detonaron la polémica muestran una caravana de camionetas decoradas con motivos navideños circulando por la cabecera municipal de Heliodoro Castillo, en la región serrana del estado. En los videos se observa a hombres armados lanzando dulces y regalos desde los vehículos, algunos incluso disfrazados de Santa Claus, mientras niñas y niños recogen las golosinas en las calles.
De acuerdo con versiones difundidas en plataformas digitales, la caravana habría ocurrido la noche del 21 de diciembre y existiría la intención de repetir la entrega de regalos el día de Navidad en otras comunidades donde este grupo mantiene presencia. Estas escenas generaron reacciones divididas, entre quienes ven estos actos como una estrategia de propaganda criminal y quienes los interpretan como gestos de cercanía con la población.
“Los Tlacos”, también identificados como parte del llamado Cártel de la Sierra, surgieron originalmente como grupos de autodefensa y con el paso del tiempo consolidaron su control en diversas zonas serranas de Guerrero. Actualmente operan en un entorno marcado por disputas con otras organizaciones delictivas, lo que ha convertido a la región en un foco constante de tensión en materia de seguridad.
Hasta ahora, ni autoridades estatales ni municipales han fijado una postura oficial sobre la autenticidad de los videos o sobre la presencia de hombres armados en eventos públicos frente a menores de edad. El pronunciamiento de la presidenta coloca el tema en la agenda nacional y vuelve a exhibir el reto que enfrenta el Estado para contener la influencia simbólica y territorial del crimen organizado en comunidades vulnerables.
