La autoestima no se construye con gestos monumentales, sino con la consistencia de pequeñas acciones cotidianas. Son estos rituales silenciosos los que, con el tiempo, reprograman la voz interior y forjan una relación más sólida y compasiva contigo mismo. 1. El Hábito de Cumplirte Tus Promesas Pequeñas Lo que haces: Terminas esa caminata de 15 minutos que dijiste que harías, lees las 10 páginas del libro o te levantas a la primera que suena la alarma. Por qué fortalece tu autoestima: Cada promesa que te haces y cumples es un mensaje de…
Leer más