Por Juan Pablo Ojeda
Lionel Messi, capitán de la selección argentina y símbolo viviente del fútbol mundial, no descarta jugar el Mundial 2026 que se disputará en Estados Unidos, México y Canadá. A sus 38 años, el astro asegura que toma la decisión “día a día”, escuchando a su cuerpo y siendo realista sobre su rendimiento, pero sin apagar la ilusión de seguir vistiendo la camiseta albiceleste en la que sería su sexta participación mundialista.
En entrevista con ESPN, Messi explicó que este año se ha sentido especialmente bien y que el calendario de la MLS podría ser un aliado en su preparación rumbo a 2026. Mientras en Europa los jugadores suelen llegar al límite físico por la intensidad del calendario, él arranca su temporada con una pretemporada fuerte en enero y luego encadena partidos con el Inter Miami en liga y en la Copa de Campeones de la Concacaf. Ese ritmo, dijo, podría ser clave para llegar en buena forma a la gran cita.
Aunque evita comprometerse, Messi reconoce que el tema ya forma parte de sus conversaciones con Lionel Scaloni, con quien mantiene una relación cercana. El técnico, según contó, siempre le dice que le gustaría tenerlo en el equipo, sin importar el rol que le toque jugar. Es un apoyo importante para el capitán, que por momentos suena prudente, pero también se deja ver ilusionado: “Ojalá pueda estar, me encantaría. De última estaré viéndolo en vivo, pero va a ser especial”.
Además de hablar de su futuro, Messi también hizo una pausa para reflexionar sobre su camino en el fútbol. Al ver un video de cuando era niño en Rosario, confesó que jamás imaginó llegar tan lejos: “Ese chico que hacía jueguitos en el patio nunca imaginó lo que lograría”. También reaccionó a un mensaje de Pep Guardiola, a quien calificó como “el mejor de todos”, por su manera de transformar el juego en cada liga donde ha dirigido.
En cuanto a la selección argentina, Messi se mostró confiado en que el equipo dará batalla en 2026. Las eliminatorias sudamericanas las resolvieron con comodidad: 12 triunfos, dos empates y cuatro derrotas, 31 goles a favor y apenas 10 en contra. Él, como siempre, fue protagonista, marcando ocho anotaciones. Pero también advirtió que en un Mundial nada está garantizado: cualquier selección puede complicar, y por eso cree que la concentración y la mentalidad serán clave.
Por ahora, Messi sigue viviendo el presente, disfrutando su etapa en el Inter Miami y analizando su futuro con calma. Pero la puerta al Mundial 2026 no está cerrada. Todo apunta a que, si el físico responde y la ilusión sigue encendida, el capitán podría escribir un último capítulo en la historia grande del fútbol.